Cuanta más gente amplíe sus jardines, mejor. Hoy en día, hay cada vez menos alimentos orgánicos en las tiendas, lo que hace que cultivar hortalizas en casa sea una prioridad aún mayor para muchas familias. La mejor forma de evitar enfermedades es no comer alimentos malos y mantener un estilo de vida saludable. ¡Un paso importante en este proceso es la agricultura orgánica! Cultivar orgánicamente significa usar una mezcla saludable de fertilizantes en lugar de depender de químicos peligrosos que podrían matar las plantas. Hay tres cosas que las plantas necesitan para sobrevivir y prosperar: potasio, fósforo y nitrógeno. Los fertilizantes químicos comprados en tiendas suelen proporcionar estos nutrientes, pero también puedes proporcionárselos a tus plantas sin utilizar productos químicos ¡preparándolos tú mismo con ingredientes que tengas en casa! ¡Descubre estas recetas para hacer los mejores fertilizantes orgánicos y ayudar a tus plantas a prosperar y crecer vigorosamente!

  • Fertilizante de té orgánico Los jardineros han utilizado este sencillo fertilizante de té durante siglos. Es fácil de preparar y aporta nutrientes: simplemente mezcla 1/4 taza de sulfato de magnesio (Epsom) con 2 tazas de orina (lo sé, esto puede sonar extraño, pero funciona de maravilla), luego llena un balde de 20 litros con pasto cortado. ¡o malas hierbas que hayas quitado del jardín! Llene el balde hasta el borde con agua y deje reposar las hojas de té durante 3 días. Luego filtra la mezcla y diluye a la mitad con agua. Aplica el té alrededor de cada planta que necesite más nutrientes.
  • Fertilizante simple de sulfato de magnesio (Epsom) Si busca una solución sencilla, mezcle sulfato de magnesio (Epsom) con agua. ¡De esta manera podrás proporcionar a tus plantas los nutrientes básicos que necesitan sin añadir químicos ni fertilizantes innecesarios! Pon una cucharada de sulfato de magnesio en un litro de agua y riega dentro y fuera de tus plantas.

3. Fertilizante de té orgánico
Los jardineros han estado usando este simple fertilizante de té durante siglos. Es fácil de preparar y aporta nutrientes: simplemente mezcla 1/4 taza de sulfato de magnesio (Epsom) con 2 tazas de orina (lo sé, esto puede sonar extraño, pero funciona de maravilla), luego llena un balde de 20 litros con pasto cortado. ¡o malas hierbas que hayas quitado del jardín! Llene el balde hasta el borde con agua y deje reposar las hojas de té durante 3 días. Luego filtra la mezcla y diluye a la mitad con agua. Aplica el té alrededor de cada planta que necesite más nutrientes.

4. Fertilizante simple de sulfato de magnesio (Epsom)
Si busca una solución sencilla, mezcle sulfato de magnesio (Epsom) con agua. ¡De esta manera podrás proporcionar a tus plantas los nutrientes básicos que necesitan sin añadir químicos ni fertilizantes innecesarios! Pon una cucharada de sulfato de magnesio en un litro de agua y riega dentro y fuera de tus plantas.

5. Fertilizante de algas
Esta receta se ha utilizado en los jardines de la gente durante siglos. Las algas contienen manitol, que mejora el rendimiento de tus plantas, ¡especialmente aquellas que prefieren suelos secos o con mal drenaje, como cactus y suculentas! Necesitarás 8 tazas de algas marinas picadas (secas o frescas). Llena un recipiente de 20 litros hasta la mitad con agua y añade las algas. Déjalo reposar durante 3 semanas, luego fíltralo y mezcla la mitad de tu té de algas en 2 litros de agua del grifo para usarlo en tus plantas.

6. Fertilizante para pasto
El fertilizante orgánico más conocido es el pasto de té. Poner hierba recién cortada en un balde de 20 litros y cubrirla con agua durante cinco días. Luego, diluya la mezcla agregando 10 tazas de agua fría por 1 taza de té, luego riegue su jardín con la mezcla.

7. Fertilizante de gelatina
La gelatina es una excelente fuente de nitrógeno que el suelo necesita para producir plantas sanas. Disuelva la gelatina normal en agua caliente, luego agregue 3 tazas de agua fría y riegue su jardín con esta solución una vez al mes. ¡Esta receta también es adecuada para plantas de interior!

8. Fertilizante de cáscara de plátano
Entierra las cáscaras de plátano en la tierra en la base de las plantas y deja que se descompongan. ¡También puedes congelar plátanos demasiado maduros y enterrarlos cerca de las plantas para proporcionar nutrientes adicionales! También puedes hacer un spray remojando cáscaras de plátano en agua durante 2 a 3 días y luego rociando esta solución sobre tus plantas.

9. Fertilizante casero en emulsión de pescado
Los desechos de pescado y el agua en la que nadan los peces son un excelente fertilizante para las plantas. Aunque lleva más tiempo prepararlo, ¡produce resultados sorprendentes! El olor de este fertilizante y su preparación no son agradables, así que prepárate si decides probar esta receta. Vierta 2 partes de agua y 1 parte de pescado en un bidón de 55 galones. Déjelo reposar durante la noche, luego llénelo hasta arriba con agua fría y cúbralo durante 3 semanas. Utilice este fertilizante orgánico en su jardín, diluido a razón de 3 galones de agua por cada 100 metros cuadrados. ¡Aplícalo alrededor de las plantas para mantener alejadas las malas hierbas y fomentar un crecimiento exuberante!

10. Fertilizante de cáscara de huevo
Las cáscaras de huevo no sólo son una excelente fuente de calcio, sino que también contienen oligoelementos que promueven el crecimiento de las plantas. Al igual que los posos del café, ¡puedes tener esta materia prima en tu casa todos los días! Tritura unas cuantas cáscaras de huevo e incorpóralas a la tierra. Si quieres hacer un spray de cáscara de huevo, pon 20 cáscaras de huevo en 1 litro de agua. Hervir las conchas durante unos minutos en agua, luego dejar reposar esta solución durante 24 horas. Al día siguiente, retira las cáscaras del agua y rocía el fertilizante de cáscara de huevo sobre tus plantas.

11. Fertilizante rápido de preparación rápida
Si solo tienes unos minutos, puedes preparar este té fertilizante rápido y fácil. Simplemente ponga 1 cucharadita de bicarbonato de sodio, 1 cucharadita de amoníaco, 3 cucharaditas de té helado y 3 cucharaditas de melaza en 4,5 litros de agua. Luego, agrega 3 cucharadas de melaza y 3 cucharadas de peróxido de hidrógeno al 3% con 1/4 taza de huesos triturados, 1 cáscara de huevo triturada y 1/2 cáscara de plátano seca. Llena el recipiente con agua, deja reposar la mezcla durante una hora y luego riega tus plantas.

12. Fertilizante de ceniza de chimenea
La ceniza de chimenea contiene carbonato de calcio y potasio, que son importantes para las plantas. ¡Agrega las cenizas antes de plantar en tu jardín!

13. té

Estiércol
El estiércol de cualquier granja se puede utilizar como fertilizante y muchas personas lo utilizan desde hace mucho tiempo en sus jardines. Necesitarás una palada de estiércol viejo, así que no lo tomes demasiado fresco o el té podría no ser tan efectivo. Puedes preparar este fertilizante remojando estiércol viejo en agua durante dos semanas. ¡Simplemente diluya la solución con agua y úsela como alternativa orgánica!

14. Fertilizante Vinagre
El vinagre puede ser una herramienta poderosa para los jardineros. ¡El ácido acético que contiene funciona bien con rosas, otras plantas de interior y hortalizas! Para este fertilizante casero, simplemente mezcla una cucharada de vinagre blanco con 4,5 litros de agua. Aplique la solución aproximadamente cada tres meses: ¡esto asegurará el éxito!

15. Fertilizante casero de harina de huesos
La harina de huesos es un excelente fertilizante orgánico y otra forma de agregar valor a cosas que de otro modo probablemente tirarías. Puedes preparar tu propia harina de huesos hirviendo huesos de pollo en agua durante dos días (apaga el fuego por la noche y déjalos reposar). Después de dos días de cocción, los huesos están lo suficientemente blandos como para molerlos en una licuadora con agua. Agregue esta solución debajo de sus plantas para enriquecer el suelo con nutrientes y mantener un crecimiento saludable.