Una de las muchas virtudes de las maravillosas suculentas es su versatilidad para poder reproducirse y propagarse . Esta operación se puede realizar en cualquier época del año, pero sin duda la primavera es la mejor época.

Lo primero que debemos hacer es cortar la planta y los métodos de esta operación dependen del tipo de suculenta que queramos reproducir. En el caso de las plantas pertenecientes al género Sedum o Echeveria , partimos de las hojas, mientras que en el caso de Aeonium , la propagación comienza desde el tallo.

1. Reproducir una planta suculenta a partir de hojas.

Elija una hoja sana y gírela con cuidado. A menudo se caen por sí solos o se separan ligeramente del tallo. Lo importante es coger la hoja entera.

Una vez que hayas recogido todas las hojas que necesitas, déjalas secar durante unos 3 días. Si se sumergen en agua podrían pudrirse.

Ten cuidado también con la planta de la que tomaste las hojas: deja que la cicatriz se cierre sin aplicar agua.

Pasados ​​los tres días, coloca las hojas en el suelo, pero sin enterrarlas y a cierta distancia unas de otras. Las raíces llegarán al suelo.

2. Reproducción por esqueje o tallo

Este método es adecuado si deseas propagar una mayor parte de una planta suculenta. Tome una rama de la planta suculenta que desea propagar y córtela del tallo, tratando de hacer un corte limpio y limpio.

Una vez cortado el tallo, retira las hojas más cercanas al corte. Déjelo secar durante 3 a 5 días antes de enterrarlo en el suelo.

Riego

Riega la tierra sólo cuando esté seca, pero ten cuidado de no excederte. En lugar de verter agua sobre la tierra, intenta rociarla para evitar que se encharque.

Para comprobar la humedad del suelo basta con introducir un dedo en él.

Las raíces tardarán aproximadamente un mes en crecer, pero todo depende de factores como el clima y la luz. Recuerda que las suculentas aman la luz.