Prosperidad creciente: La Resiliente Crassula Ovata (Árbol de Jade)

Considerado como un presagio de suerte y prosperidad en el Feng Shui, el Crassula ovata, comúnmente conocido como el árbol de jade, es un suculento de bajo mantenimiento. Floreciendo con una intervención mínima, esta planta resistente prospera con un riego constante y la exposición a la abundante luz solar.

Proveniente de África, el Crassula ovata, o árbol de Jade, es un suculento perteneciente a la familia Crassulaceae y al género Crassula. Ampliamente disponible en viveros e incluso en secciones selectas de jardinería de supermercados, esta planta se adapta perfectamente tanto al cultivo molido como en macetas, revelando su exquisito potencial de floración en condiciones favorables. Para aquellos que se adhieren a los principios del Feng Shui, se cree que colocar este suculento a la derecha de la entrada principal, orientado al norte, atrae la suerte y la prosperidad al hogar.

Creciente Crassula Ovata:

Características de la Planta: Crassula ovata tiene una apariencia de arbusto con un tallo marrón claro y ampliamente ramificado. Sus hojas de forma ovalada son carnosas, mostrando un tono verde claro ocasionalmente bordeado de rojo. Una característica distintiva de estas hojas es su composición rica en agua, lo que resulta en una apariencia consistentemente turgente. Los tallos suculentos mantienen una consistencia carnosa, ramificándose para formar una corona redondeada.

Exposición: Prosperando en luz y calor, Crassula ovata aprecia un lugar bañado por el sol, idealmente ubicado cerca de una pared para retener temperaturas elevadas durante la noche. Se debe tener precaución en climas más fríos, ya que esta suculenta es vulnerable a las temperaturas que caen por debajo de -7 °C.

Floración: El período de floración de Crassula ovata abarca de abril a junio. Delicadas flores de color rosa pálido o blanco, que exhiben una forma de estrella distintiva, se agrupan en el vértice de las ramas de la planta.

Suelo y fertilización: La composición óptima del suelo para Crassula ovata implica una combinación igual de tierra y arena para plantar en verde. El cultivo en tierra prospera en suelos arenosos o de grava, asegurando un drenaje efectivo del agua. Durante la fase vegetativa ( De mayo a noviembre ), administre un fertilizante vegetal suculento especializado con nitrógeno equilibrado, fósforo, potasio y microelementos esenciales.

Riego: El riego regular es esencial, siempre que la superficie del suelo esté seca. Emplee agua a temperatura ambiente, preferiblemente agua de lluvia recolectada.