El inicio de la primavera siempre va asociado a la explosión de Colere dada por las flores, las prímulas y otras preciosas flores de la pradera son las que inician el baile pero, cuando la primavera cobra vida en el mes de mayo, son las rosas las protagonistas. Indiscutible de la mayoría de los jardines.
Esta extraordinaria flor encierra un encanto atemporal, pero disfrutar de su belleza puede no ser prerrogativa del mes de mayo. De hecho, gracias a unos sencillos trucos, podrás hacer que tus rosas vuelvan a florecer en el mes de agosto, haciendo de tu jardín un oasis único de colores y aromas capaz de acompañar el final del verano con esta estupenda flor.
Hacer florecer las rosas en agosto es posible, sólo necesitas saber este sencillo truco
En el mes de agosto, los jardines no suelen estar en su punto máximo de floración, pero están a punto de perder su abundancia de color. Sin embargo, esto no es una verdad absoluta, al menos en lo que respecta a nuestras queridas rosas, capaces de volver a florecer en este período aunque no seas un jardinero experto, sino simplemente utilizando un truco que muchos aún desconocen.
Las rosas con su variedad de formas y colores son flores que requieren especial atención y, aunque agosto es un mes de floración, el arte de hacer florecer las rosas en este período no es tan obvio y requiere de una serie de comportamientos responsables. Las rosas requieren de cuidados constantes y armonía entre algunos factores como la fertilización , la exposición, el riego y la poda.
Durante el verano también es más imprescindible regular la cantidad de sol que llega a nuestras plantas , sobre todo en condiciones de humedad donde pueden surgir problemas como parásitos y otras enfermedades. Los pulgones y los pequeños insectos pueden ser especialmente perjudiciales para las rosas y, mientras que para otras plantas una simple solución de agua y jabón de Marsella puede resultar eficaz , para estas es aconsejable utilizar productos especiales como el aceite del árbol del té .
La cochinilla, la “enfermedad” o la “roya” son otras de las patologías más comunes y debilitantes para tu rosaleda y para prevenir estos estados la poda es otro de los aspectos más fundamentales. La poda durante el verano puede representar un trauma para la planta y para un manejo óptimo será mejor optar por una poda moderada durante el otoño o principios del invierno . Algo a tener en cuenta durante esta fase es realizar siempre cortes limpios por encima del cogollo, de forma que tu planta esté lista para renacer en primavera.
Siguiendo estos sencillos consejos no será difícil hacer que tus rosas vuelvan a florecer incluso en el mes de agosto, los resultados pueden ser realmente increíbles y garantizar la envidia de tus vecinos. La observación sigue siendo un parámetro fundamental, la clave para actuar siempre con prontitud ante cualquier problema, con un poco de atención tus rosas pueden convertirse en las protagonistas absolutas de tu jardín y darle un encanto antiguo y nunca banal hacia el final de la temporada de verano.