Si tienes una rosa en tu balcón o si te han regalado una y quieres multiplicarla, sabes que esto sólo es posible con su tallo. Las rosas se encuentran entre las flores más bellas del mundo y pueden decorar cualquier lugar de la casa, sin importar su color.

Aunque las rosas se consideran difíciles de cuidar, pueden propagarse a partir de un tallo y reproducirse sin cesar. Este es un trabajo simple que no requiere experiencia en horticultura.

Aquí se explica cómo obtener una hermosa colección de rosas a partir de tallos.

Primera etapa :

Lo primero que debemos hacer es identificar el lugar ideal para las rosas. Cava un hoyo de unos 15 cm de profundidad y llénalo con arena. Utilice los siguientes consejos para elegir la ubicación correcta:

No coloques los rosales demasiado juntos. No coloques rosales demasiado cerca de una pared o debajo de un árbol. Asegúrate de que los rosales reciban aire y luz solar, preferiblemente por la mañana.

Segundo paso :

Obtener tallos o esquejes de rosas que serán utilizados para la propagación y desarrollo de nuestro jardín. Es importante que los tallos midan entre 20 y 25 centímetros.

Tercer paso :

Este paso es tan simple como importante. Los tallos deben limpiarse quitando hojas e impurezas para favorecer su regeneración.

Paso cuatro:

Coloca los tallos de rosas en la arena, dejando algo de espacio entre ellos. Presiona los tallos firmemente en la arena para mantenerlos en su lugar.

Paso 5:

Los esquejes del rosal cubresuelo ‘El Hada’ se cortan y se colocan en el miniinvernadero, previamente colocados en un medio de cultivo (activador de raíces Neudofix) con una herida en la base del brote.
Cubre los tallos de las rosas con abono y presiónalos bien con los pies para compactarlos.

El trabajo está hecho: sólo queda esperar a que la naturaleza siga su curso.