La hortensia es sin duda uno de los arbustos con flores más bonitos que puedes tener en casa. No es necesario dedicarle tu propio jardín o espacio exterior.

Con sus colores vivos, la hortensia es una planta muy adecuada para cultivar en macetas.

Para conseguir una planta de gran tamaño, primero debes elegir la variedad que más te guste y luego determinar el tipo de maceta y tierra que mejor se adapta a tus necesidades. Hay ciertos tipos de hortensias que requieren una maceta grande. Recomendamos utilizar arcilla o grava en el suelo, pero no posavasos ya que esto puede provocar una retención excesiva de agua.

Hortensia en maceta – fuente: spm

A la hora de comprar una hortensia lo primero que debes pensar es en encontrar un lugar agradable donde reciba luz pero también sombra.

De hecho, a la hortensia, como muchas otras plantas, no le gusta la luz solar directa, pero se alimenta de luz. ¡Una bonita zona con sombra es ideal! Las hortensias crecen bien en suelos ácidos, es decir, suelos con un pH entre 6,5 y 4,5. Sus hermosos colores a menudo dependen de la acidez del suelo: los que se inclinan por el rosa o el granate prefieren un pH alto de 6 o incluso 7, mientras que los que se inclinan por el azul prefieren un pH muy ácido entre 4 y 5. Dependiendo de cómo mejorar el color de tu hortensia, intenta mejorar y modificar la tierra.

Hortensia en maceta – fuente: spm

En invierno no te causará muchos problemas, pero en verano hay que tener cuidado con el calor ya que a esta planta no le gustan las altas temperaturas. Si elige mantener la planta en el interior, asegúrese de mantenerla alejada de cualquier fuente de calor, incluso en invierno.

Necesita una maceta grande con un diámetro de al menos 40 cm y llenar el fondo con arcilla expandida.

Luego puedes sacar la planta de su maceta. Notarás que tiene raíces gruesas. ¡Corta las raíces antes de colocar la planta en su nueva maceta!

Este paso es muy importante, de lo contrario la planta tendrá dificultades para extender sus raíces y morirá rápidamente. No coloques la planta demasiado baja, sino a unos centímetros del suelo (para que las raíces no se pudran al regar).

El primer riego debe     ser abundante, luego se debe ajustar según la temporada. Para combatir el calor, considere regar una vez al día en verano. Sin embargo, ten cuidado de no regar las hojas para prevenir enfermedades fúngicas que podrían afectar a tus plantas.

El primer nudo a cortar si quieres hacer una poda de hortensias.

Cortar hortensias – fuente: spm

Respecto a la fertilización, se recomienda utilizar un fertilizante líquido que se añade al agua de riego al menos una vez por semana.

Sin embargo, el cultivo se realiza por esqueje y es bastante sencillo.

¿Cómo se toman los esquejes?

Los esquejes de plantas herbáceas se pueden tomar entre junio y agosto con el crecimiento verde fresco de la planta (no en flor) o durante el período de inactividad, que es entre octubre y diciembre.

En este caso, tome un esqueje semileñoso.

En verano, haga lo siguiente: corte el cogollo a una altura de unos 30 cm, luego córtelo nuevamente una vez que haya identificado el primer nudo (donde crecen las dos hojas en la parte inferior). Retira también estas dos hojas y agarra todas las demás con una mano para poder cortar las puntas de las hojas restantes. En este punto, tu brote debería verse así y estar listo para colocar en un frasco con 2-3 cm de agua:

Hojas de hortensia – fuente: spm

Aquí tienes un consejo para enraizar mejor tu esqueje:

¡Utilice media tableta efervescente de aspirina! No olvides cambiar el agua cada dos días durante al menos 40 días (incluso con aspirina). Al cabo de unos meses notarás que se desarrollan algunas pequeñas raíces, así que es hora de preparar una maceta. Recuerda siempre que los esquejes producen una planta idéntica a la planta madre.