Crassula Ovata: una suculenta próspera según el Feng Shui
1. Los encantos del árbol de jade y la influencia del Feng Shui
Según el Feng Shui, la Crassula ovata, comúnmente conocida como árbol de Jade, no es sólo una suculenta; es un símbolo de suerte y prosperidad. Esta planta fácil de cultivar prospera con un cuidado mínimo y requiere riego regular y exposición a pleno sol. Originario de África, el árbol de jade pertenece a la familia Crassulaceae y al género Crassula, lo que lo convierte en una opción popular que se encuentra en viveros y departamentos de jardinería.
2. Versatilidad en el crecimiento: elegancia en maceta o belleza en el suelo
Gracias a su versatilidad, Crassula ovata prospera tanto en el suelo como en macetas. En las condiciones adecuadas, esta suculenta puede sorprenderte con su cautivadora floración. Siguiendo los principios del Feng Shui , se cree que colocar el árbol de Jade en maceta a la derecha de la entrada principal, mirando al norte, trae suerte y prosperidad al hogar y a sus habitantes.
3. Características y apariencia: una maravilla suculenta
Crassula ovata se parece a un arbusto con un tallo muy ramificado de color marrón claro. Sus hojas de forma ovalada, carnosas y de color verde claro, a veces teñidas de rojo, contienen una cantidad importante de agua, manteniendo un aspecto constantemente turgente. Los tallos, de consistencia carnosa, se ramifican formando una corona redondeada.
4. Condiciones ideales: luz, calor y precaución con la temperatura
Crassula ovata, que prospera gracias a la luz y el calor, aprecia una posición a pleno sol, preferiblemente junto a una pared para retener temperaturas más altas durante la noche. Sin embargo, conviene tener cuidado con las bajas temperaturas, ya que esta suculenta no soporta temperaturas inferiores a -7 °C.
5. Flores de belleza: de abril a junio
Crassula ovata nos deleita con sus delicadas flores, que muestran tonos rosa pálido o blanco con una distintiva forma de estrella. Estas flores se agrupan en la parte superior de las ramas de la planta durante el período de floración entre abril y junio.
6. Suelo, fertilización y cuidado equilibrado: una receta para el éxito
El suelo óptimo para Crassula ovata es una mezcla de tierra verde para plantar y arena. El cultivo enterrado se beneficia de suelos arenosos o de grava, lo que garantiza un drenaje eficiente del agua. Durante la fase de crecimiento activo (de mayo a noviembre), administre un producto especializado para plantas suculentas con nutrientes equilibrados, incluidos nitrógeno, fósforo y potasio, para apoyar el desarrollo de la planta.
7. Sedientos pero exigentes: regar la sabiduría
El riego regular es esencial para Crassula ovata, dirigido a la sequedad de la superficie. Utilice agua a temperatura ambiente, preferiblemente agua de lluvia recolectada, para una hidratación óptima.
8. Facilidad de poda: requiere un mantenimiento mínimo
La naturaleza fácil de cultivar de Crassula ovata se traduce en necesidades mínimas de poda. Simplemente retire las ramas y hojas secas para mantener su vitalidad.
9. Vigilancia ante las adversidades: enfermedades y parásitos
Si bien no son muy susceptibles a enfermedades y parásitos, la vigilancia es crucial para monitorear las prácticas de riego y la exposición. El exceso de agua puede provocar la pudrición del tallo, la cantidad insuficiente de agua puede provocar la decoloración de las hojas y las corrientes de aire o las bajas temperaturas pueden provocar la caída de las hojas. Esté atento a las cochinillas, eliminándolas rápidamente con un algodón empapado en una mezcla de alcohol y agua.