El ajo se destaca como un ingrediente culinario ampliamente utilizado, no sólo por su aportación de sabor a los platos sino también por sus importantes beneficios para la salud. Repleto de vitaminas A, B, C y E, antioxidantes, calcio, potasio, zinc, selenio y alicina (un potente antibiótico natural), el ajo se gana su estatus de superalimento y nutracéutico. Si bien a menudo se asocia con la protección contra los vampiros, este ingrediente versátil tiene un lugar valioso en su cocina y régimen de salud.
A pesar de su popularidad, el ajo comprado en las tiendas puede resultar relativamente caro. Sin embargo, un solo diente de ajo posee el potencial de mantener su suministro indefinidamente. Aprende el sencillo método de cultivar ajo en casa en maceta con resultados perpetuos.
Que necesitas:
- Tierra para macetas
- una cabeza de ajo
- Una olla
Nota: Cada bulbo que plantes se multiplicará y producirá 3 o 4 dientes de ajo nuevos.
Pasos para el ajo en maceta:
- Adquiera una maceta grande, preferiblemente con orificios de drenaje, y llénela con tierra para macetas de alta calidad. Separe con cuidado los dientes de la cabeza de ajo, asegurándose de que estén frescos y sin daños.
- Plante los dientes a unos 2,5 cm de profundidad con las puntas expuestas. Mantenga una distancia de 10 cm entre cada diente. Añade una fina capa (apenas 1 cm) de tierra para macetas encima.
- Coloque la maceta en un lugar soleado y riegue ligeramente. El ajo requiere un riego mínimo, así que mantenga la tierra ligeramente húmeda sin exagerar.
- Observa cómo crecen los brotes de ajo. Si aparecen flores, quítelas rápidamente para conservar el sabor del ajo.
- Coseche el ajo cuando las plantas tengan 5 o 6 hojas y comiencen a amarillear y marchitarse.
- Seque el ajo cosechado en un lugar fresco y seco durante aproximadamente una semana, como un garaje o un sótano.
Tenga en cuenta que el ajo tarda de 8 a 10 meses en crecer, con períodos óptimos de siembra a principios de primavera u otoño. Además, los tallos verdes del ajo son comestibles y se pueden disfrutar como cebolletas.
Si sigue estos sencillos pasos, podrá disfrutar de un suministro continuo de ajo de cosecha propia, mejorando tanto sus creaciones culinarias como su bienestar.