Para mimar y cuidar tus plantas, los expertos sugieren una serie de remedios naturales que implican el uso de restos de comida.

Si a menudo tiras cáscaras de limón a la basura, debes saber que se trata de un producto muy beneficioso para tus plantas. ¡Lo que ocurrirá es sencillamente increíble!

Si no eres un profesional de la jardinería, no es nada fácil tener plantas frondosas y sanas. Es más, los parásitos, los hongos y las enfermedades pueden atacar en cualquier momento, lo que dificulta el mantenimiento de las plantas.

Para ello, tenemos la desafortunada costumbre de recurrir a productos químicos. Sin embargo, estos productos suelen tener un precio prohibitivo y son muy perjudiciales para la salud y, sobre todo, para el medio ambiente. Entonces, ¿por qué no cambiarlos por ingredientes naturales que funcionen igual de bien?

Es el caso de la cáscara de limón, muy útil en el jardín para abonar las plantas y combatir la invasión de insectos que las devastan. Puede utilizarla de dos maneras.


Cáscara de limón: ¡el mejor amigo de las plantas!

La ralladura de limón no sólo beneficia al organismo, sino también a las plantas de su jardín. Pero, ¿cómo aprovechar al máximo este beneficioso producto?

Por ejemplo, si pones cáscara de limón en las macetas de tus plantas, su función es eliminar hormigas, parásitos y otros insectos que puedan infestarlas. La cáscara de limón también ayuda a mejorar tus plantas. Se vuelven más fuertes y sanas gracias al nitrógeno, el fósforo y el potasio.

Para beneficiarte de estos nutrientes y proteger tus plantas de las plagas, corta la cáscara de limón en trozos pequeños y añádelos a la tierra alrededor de tus plantas. La acidez del limón también modificará el pH de la tierra, haciéndola más ácida.


¿Cómo puedo hacer abono natural con cáscara de limón?

En unos sencillos pasos, puedes crear un abono casero con cáscara de limón. Empieza por tomar las cáscaras de dos limones, ponerlas en un cazo con 1 litro de agua y llevar la mezcla a ebullición.

Cuando la mezcla se haya enfriado, viértela en una botella con pulverizador y déjala reposar durante 3 días. A continuación, pulveriza el líquido sobre las plantas. Utilice este abono natural dos veces al mes para obtener plantas sanas y vigorosas durante todo el año.

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