El tronco de la felicidad , nombre popular de Dracaena fragrans , es una planta decorativa muy extendida y apreciada en todo el mundo. Según la filosofía oriental, esta planta tiene un significado positivo y representa la abundancia durante su floración.

Sin embargo, para hacer florecer el tronco de la felicidad es necesario adoptar los cuidados adecuados, que van desde la exposición adecuada hasta el riego correcto. Siguiendo estos cuidados, esta planta florecerá dos veces al año, en primavera y otoño.

Si ya tienes en casa un baúl de la felicidad que nunca ha florecido, probablemente no lo estés cuidando adecuadamente. A continuación enumeramos los cuidados básicos para hacer florecer el baúl de la felicidad .

Luz

Evite exponer el tronco de la felicidad al sol directo, que podría quemarlo. Lo ideal es colocarlo en un espacio donde pueda recibir iluminación natural, pero no excesiva. La oscuridad podría pudrir las hojas y hacer que se sequen rápidamente.

Irrigación

La tierra del tronco de la felicidad debe estar constantemente húmeda: riega la planta dos o tres veces por semana. Si las hojas se vuelven marrones y débiles es señal de que necesitan más agua y esto ocurre frecuentemente durante los meses de verano.

Poda

Este paso es muy importante. Cuando una hoja del tronco de la felicidad comienza a pudrirse o secarse, es preferible retirarla inmediatamente. Lo ideal es que una vez hayan florecido y estén secas, se retiren de la planta junto con cualquier otro residuo como otras hojas o trozos de flor.

Las flores del tronco de la felicidad son blancas y pequeñas, cuando se secan se vuelven moradas y luego marrones.