Cultivar calabacines es sencillo y lo pueden hacer los principiantes. Sólo tendrás que invertir algo de tiempo y esfuerzo, como cualquier otra planta del jardín o de casa. Sin embargo, algunas variedades de calabacines no crecen bien en macetas, así que elígelas con cuidado.

¡A continuación encontrará toda la información que hemos recopilado para cultivar con éxito estas plantas en nuestro artículo detallado para principiantes que desean comenzar su propio jardín de hierbas en macetas hoy mismo!

Las mejores variedades de calabacín para cultivar en macetas
El calabacín es una verdura de verano muy popular, de la que existen dos especies principales. Las variedades grandes son adecuadas para cultivar en macetas, mientras que las variedades tupidas son adecuadas para el jardín.

A continuación se ofrecen algunos consejos para cuidarlo de forma óptima:

Astea: Astea es una variedad francesa tupida especialmente diseñada para el cultivo en macetas. Los frutos crecen en la base de la planta, lo que facilita su cosecha durante 48 días.
Patio de Buckingham: Las plantas de plátano son una gran adición a cualquier jardín; ¡Prosperan en casi cualquier clima y producen magníficos frutos amarillos listos para cosechar dentro de los 40 días posteriores a la siembra!
Bush Baby: Las plantas Bush Baby crecen de 7 a 9 pulgadas de alto y producen calabacines tan encantadores como parecen. Esta verdura de color verde oscuro con rayas grises mide sólo 6 cm de largo, pero madura en 59 días.
Verde oscuro: La variedad de pepino Dark Green produce frutos de color verde oscuro de 15 a 20 cm de largo con pulpa clara. Esta vigorosa planta tradicional alcanza una altura madura de 24-36 cm y suele estar lista para cosechar entre 45 y 55 días después de la siembra.
Dorado: Esta fruta dorada ha sido una de las favoritas del jardín durante décadas. Los frutos de color amarillo brillante están listos para la cosecha 50 días después de la siembra y producen cosechas abundantes durante los meses de verano.
Gris: ¿Conoces ese calabacín con su piel loca manchada de verde y blanco? Esto es Gris o Tierno Gris: ¡esta variedad tupida y resistente al calor alcanza una altura de 24 a 36 centímetros cuando está madura! Con una longitud de 15 centímetros, los frutos son de color mediano: verdes por fuera, pero a partir de los 15 centímetros aparecen manchas grises antes de volverse tuberosos. Y como si no estuvieran ya lo suficientemente frías… esta planta tiene un tiempo de cosecha sorprendentemente largo: ¡42-45 días desde la plántula hasta la fruta madura en tu plato!
1. Elige el recipiente
Algunas plantas tienen raíces poco profundas y no necesitan macetas muy profundas. Algunas consideraciones sobre el tamaño de la maceta dependen en gran medida de la variedad elegida, pero un recipiente de aproximadamente 18 pulgadas de profundidad debería ser suficiente para contener 5 galones de tierra u otros materiales como rocas.

Los recipientes pueden ser de diferentes materiales, como plástico, cerámica o terracota, pero deben tener al menos un orificio de drenaje para que la planta no se ahogue si necesita más agua de la que está disponible en su entorno.

2. tierra para macetas
Las plantas de calabacín son parte de la familia de las cucurbitáceas y, por lo tanto, necesitan tierra húmeda para desarrollarse. ¡La tierra orgánica para macetas retiene el agua y mantiene la planta saludable!

Tercera ubicación
A las plantas de calabacín les gusta el calor. ¡Incluso lo necesitan para desarrollarse al máximo! Los calabacines crecen bien a temperaturas entre 21°C y 4°C. También es importante que reciban 6 horas de luz solar al día para poder crecer.

Estas deliciosas calabazas deben plantarse en un lugar lo más soleado posible para que crezcan rápidamente: preferiblemente en el alféizar de una ventana soleada o en un jardín en terrazas que reciba mucho sol durante todo el año.

4. Plantar y regar
El calabacín no es una planta que se pueda plantar en cualquier momento. Para cultivar calabacines, la temperatura del suelo debe ser de al menos 15 grados centígrados. Si se mantiene por debajo de esta temperatura durante demasiado tiempo, es probable que la semilla no germine.

Sin embargo, si comienzas a sembrar a finales de marzo o abril, cuando las temperaturas son más cálidas, y continúas hasta principios de noviembre, estas calabazas en flor pueden producir hasta 5 kilos cada una en una temporada de crecimiento, lo que las convierte en grandes productoras que necesitan espacio entre plantas para crecer cómodamente. .

Al sembrar estas semillas, deja 10 cm de espacio entre ellas y entre sí. Estas plantas amarán tu jardín