En las hojas de las plantas se acumula polvo que, mezclado con la humedad, acaba reduciendo su brillo natural y haciéndolas parecer más apagadas. Las hojas que tienen una superficie bien limpia también son más sanas y contribuyen mejor al crecimiento de las plantas.
Las plantas de interior también están sujetas a este fenómeno, que muchas veces se ve agravado por el agua que se rocía sobre ellas para regarlas.
En el mercado existen abrillantadores elaborados especialmente para la jardinería y que son capaces de sacar brillo a las hojas de las plantas , pero en esta ocasión te explicamos cómo preparar uno natural.
Ingredientes :
- media cucharada de aceite de oliva
- 1 litro de agua a temperatura ambiente
- 1 cucharada grande de vinagre blanco
Vierte el agua y el vinagre en una botella con atomizador y agita bien para integrar los ingredientes.
Rocíe la solución en la parte superior de las hojas de las plantas y limpie con un paño de microfibra. Tenga mucho cuidado de no dañar las hojas o dejarlas caer.
Por último, añade 5 gotas de aceite de oliva a otro paño limpio y pásalo por las hojas de arriba a abajo, sin frotar ni hacer movimientos circulares.
No aplique este remedio para pulir las hojas de las plantas más de dos veces por semana.