Las orquídeas, con su impresionante belleza, son flores muy apreciadas. No sólo puedes disfrutar de sus flores anualmente, sino que también tienes la fascinante opción de propagarlas y observar el crecimiento de los retoños más pequeños.

Existen varias técnicas efectivas para la propagación de orquídeas, que permiten la reproducción continua de sus preciadas plantas.

Un método común es la propagación mediante esquejes o keiki. Profundicemos en cómo se hace esto.

Propagar orquídeas usando Keiki Un keiki es una planta joven que emerge del tallo de una orquídea y presenta una excelente oportunidad para la propagación. Esta nueva planta es un clon de la madre, resultante de la reproducción asexual. Los Keikis pueden surgir de forma natural, pero también puedes favorecer su desarrollo. Así es cómo:

Fomentar el crecimiento Keiki en las orquídeas Después de la floración, recorte el tallo de la flor de la orquídea ligeramente por encima de la base. Exponga con cuidado el área del “nodo” al aire pelándola suavemente. Esta exposición podría estimular el surgimiento de un keiki.

Plantar un Keiki Una vez que las raíces de un keiki miden entre 4 y 5 centímetros de largo, estará listo para replantarlo. Colóquelo en el mismo recipiente que la orquídea madre para garantizar condiciones de crecimiento y niveles de humedad idénticos.

Separe el keiki a unos 3-5 centímetros del tallo de la flor y plántelo junto a la planta madre. Asegúrese de que las raíces miren hacia abajo y estén ligeramente cubiertas con tierra. Además, entierre el tallo de la flor recortado, anclándolo en el suelo.

Después de la madurez, puedes separar con cuidado el keiki de la planta madre.

Propagación de orquídeas mediante esquejes Para la propagación por esquejes de tallo, prepare una bandeja impermeable de unos 8 centímetros de profundidad. Rellénelo con arena humedecida o musgo Sphagnum.

Corta un tallo de 30 centímetros de la orquídea madre con un cuchillo afilado. Córtelo en varios trozos de 3 pulgadas, cada uno con un cogollo inactivo. Coloque musgo o arena humedecido en la bandeja y coloque los esquejes sobre ella. Cubrir con plástico y mantener en un ambiente a 15°C y alejado de la luz directa. Después de algunas semanas, aumente la temperatura a 24-30 grados, asegurándose de que la bandeja permanezca húmeda (pero no demasiado mojada). Cuando aparezcan brotes y raíces, vuelva a cortar los esquejes. Prepare macetas pequeñas con una mezcla de corteza, tierra volcánica y musgo Sphagnum humedecido. Plante las orquídeas con los brotes hacia arriba. Coloque las orquídeas recién propagadas en un área brillante y con luz solar indirecta. Riegue regularmente, evitando el exceso para evitar que se pudra. Mantenga un ambiente húmedo para las plantas, manteniéndolas alejadas de fuentes de calor directas.

A través de estos métodos, puede propagar orquídeas con éxito y disfrutar de una colección cada vez mayor de estas exquisitas plantas.