No es raro ver cebollas brotar rápidamente tan pronto como las llevas a casa. Al ver este pequeño brote verde que sale de la verdura, nos apresuramos a tirarlo a la basura. Sin embargo, es muy posible continuar el proceso de germinación para tener cebollas interminables. Incluso si no tiene un pulgar verde, aún puede cultivar cebollas con éxito siguiendo estos pasos al pie de la letra. 

Cuidado, la basura no es el destino correcto para las cebollas germinadas: no vuelvas a cometer este error

Tan pronto como las cebollas muestren sus primeros brotes, puedes cultivarlas. La idea es ponerlas en un florero o recipiente con tierra. Sin embargo, se deben hacer algunas modificaciones a las cebollas antes de enterrarlas. 

El primer paso es pelar las cebollas para obtener sólo el bulbo . Esta es la única parte de la cebolla que se puede plantar. Para enterrarlos, es recomendable hacer pequeños agujeros de 10 a 15 cm antes de insertarlos con la punta hacia arriba. 

Luego llega el momento de regar. Este gesto debe permitir que el suelo permanezca húmedo. Además, recuerde eliminar con las manos  las malas hierbas que puedan propagarse en el interior.

Para saber si es el momento de cosechar las cebollas, basta con observar las hojas detenidamente. Si estos últimos tienen un tinte amarillo y parecen querer caer, entonces puedes proceder a la cosecha. 

Tras la recolección, es recomendable dejar secar unos días antes de consumir en tus platos. Si todavía tienes algunos, puedes replantarlos y así sucesivamente. Consejo adicional: plante cada dos o tres semanas para prevenir el ataque de plagas y plagas de insectos.