Entre los enemigos de la huerta y de los árboles frutales tenemos las hormigas. De hecho, a estos insectos les encantan los cultivos además de infestar nuestros hogares. Para eliminarlos de una vez por todas, puedes confiar en esta técnica.
Dile adiós a las hormigas de los frutales y conoce la mejor solución preventiva contra el pulgón
Realiza este tratamiento al inicio del periodo de crecimiento de tus plantas. La idea es crear barreras naturales que repelerán a las hormigas. Puedes utilizar neumáticos viejos o película para proteger la corteza.
Envuelve el tronco del árbol con film transparente . Recuerda sustituir el film de cocina periódicamente. Sólo se necesitan 2 o 3 capas para cubrir adecuadamente el tronco del árbol. Gracias a esta técnica sencilla y económica, las hormigas no se atreverán a acercarse a la corteza del árbol.
Si, por el contrario, a pesar de ello las hormigas consiguen traspasar las barreras, es aconsejable formar una barrera adicional utilizando una capa de pomada grasa . Cepille con grasa lubricante mecánica que puede encontrar en una gasolinera.
La grasa debe aplicarse directamente sobre la película . Así podrás disuadir a las hormigas. Eso sí, recuerda poner una capa de paño de lana debajo de la barrera, porque el calor puede derretir la grasa que quedará incrustada en el tronco.
¿Qué explica la atracción de las hormigas por los árboles frutales?
El verano se caracteriza por la invasión de hormigas en el jardín, huerta y huerto . Estos se encuentran entre los insectos sociales que se cuidan unos a otros y siempre trabajan en grupo.
Cuando se trata de invasiones de árboles frutales, también nos encontramos con el pulgón. A veces las hormigas comen pulgones . Pero para ser más específicos, a las hormigas les interesan las sustancias azucaradas de los pulgones .
Cabe señalar que estas plagas de insectos favorecen la caída de las hojas y bloquean el crecimiento normal de la planta. Si consigues deshacerte de los pulgones, las hormigas lógicamente desaparecerán.
Sin embargo, las hormigas son esenciales para la naturaleza porque aumentan la fertilidad del suelo. En concreto, el nivel de potasio y fósforo aumenta en el suelo. Como repelente natural de hormigas, puedes utilizar anís, perejil o incluso talco.