Los amantes del verde suelen decir que la jardinería es una terapia , y esta afirmación es aparentemente científicamente correcta.
La jardinería puede mejorar la salud física y proporcionarnos frutas y verduras, pero sus beneficios terapéuticos van mucho más allá . Desde la relajación hasta el alivio del estrés , los terapeutas están añadiendo la jardinería a su lista de prácticas para mejorar la salud física de sus pacientes.
Interactuar con la naturaleza, incluso la simple observación de árboles o un paseo por el campo, puede tener un impacto terapéutico increíble.
Un estudio ha demostrado que los pacientes hospitalizados que tienen vistas a un jardín o a un bosque se recuperan más rápido después de la cirugía.
Si observar la naturaleza desde un balcón o una ventana puede ofrecer beneficios para la salud, caminar por un jardín o un bosque puede aportar aún más.
En contacto con la naturaleza, los pacientes se sienten menos deprimidos y mejoran el sueño, el estado de ánimo y la concentración. La jardinería también puede retrasar la aparición del Alzheimer y la demencia .
Mantener viva una planta aumenta la sensación de bienestar y responsabilidad, especialmente en los pacientes más débiles.