Los entusiastas de la jardinería la mayoría de las veces no compran plantas ya cultivadas, sino que las cultivan ellos mismos a partir de semillas.
Cualquiera con habilidad para la jardinería sabe lo que significa poder ver crecer lo que has plantado, y cuando no emergen brotes de las semillas te sientes decepcionado y tratas de entender qué salió mal.
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Cuando las plantas no brotan, puede deberse a varias razones. Puede haber muchos factores que contribuyan a que el brote no surja. Puede que dependa de un factor externo como la luz o las condiciones climáticas, o puede que dependa de algo que hemos hecho mal.
La mayoría de las veces, sin embargo, cuando las plantas no germinan no depende de cómo hayamos cuidado la planta, sino que puede depender de otros factores como, por ejemplo, un incorrecto mantenimiento de la semilla. Así que veamos qué errores evitar para que nuestra planta pueda nacer sin problemas.
7 errores a evitar para conseguir brotes
Los motivos por los que una semilla no germina pueden ser diferentes y no siempre dependen de nosotros. Veamos qué errores evitar para que nuestras semillas puedan generar nueva vida.
- SEMILLAS VIEJAS
Si las semillas están viejas y vencidas, es probable que la plántula no crezca. Esto se debe a que la semilla no tendrá fuerzas para germinar. Por eso, recuerda que toda hierba aromática o planta vegetal tiene fecha de caducidad. Por ejemplo, las semillas de cebolla duran sólo 1 año.
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- MAL ALMACENAMIENTO DE LAS SEMILLAS
No sólo tienen fecha de caducidad, sino que también deben estar bien almacenadas. Un almacenamiento deficiente de las semillas puede ser un factor que impida la germinación. Nada más comprarlos, asegúrate siempre de guardarlos en un lugar fresco, seco y sin luz. Un mueble en el dormitorio o en la sala de estar funcionará bien. - DEMASIADO FRÍO
Muchas veces cuando compras semillas en el supermercado pone la fecha de siembra preferida, pero además que si quieres también puedes sembrar en otras épocas del año. El consejo siempre es evitar sembrar en invierno, sino empezar a sembrar alrededor de marzo o abril, cuando las temperaturas son un poco más suaves. Esto es aún más cierto si vives en una zona caracterizada por los inviernos más duros.
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- JARRÓN ANTIGUO
La elección del jarrón también es importante. Siempre es mejor optar por jarrones nuevos, ya que los viejos pueden esconder sorpresas si no se limpian correctamente. De hecho, el moho se forma fácilmente en los jarrones viejos, a veces ni siquiera perceptible a simple vista. - SUELO EQUIVOCADO
El error más común es elegir un suelo universal. Nada podría estar más equivocado. Cada planta está acostumbrada a crecer en un hábitat determinado, con unas características de suelo determinadas. Lo ideal es encontrar o crear una mezcla bastante homogénea y equilibrada que contenga las dosis adecuadas de turba, fibra de coco y perlita. - DEMASIADA/POCA AGUA
Darle la cantidad adecuada de agua a la planta también es fundamental. Demasiada agua podría hacer que las semillas se pudran, mientras que muy poca agua no les permitiría germinar. Por lo tanto, asegúrese de que la tierra esté siempre húmeda pero nunca mojada.
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- PROFUNDIDAD EQUIVOCADA
Uno de los errores que más se comete es introducir las semillas muy profundamente. En realidad, las semillas de las hierbas aromáticas o para ensaladas simplemente deben cubrirse con unos 2-3 cm de tierra. De esta forma no tendrán demasiadas dificultades para salir.
Consejos para una siembra perfecta
Hemos visto qué errores evitar, pero ¿hay alguna forma de conseguir que las semillas germinen? Por supuesto que existe, así que veamos qué pasos tener en cuenta para asegurar una correcta germinación de nuestras semillas.
Lo primero que debemos hacer es preparar las semillas . Para prepararlos es necesario ponerlos en remojo , para que su envoltura externa se ablande y facilite la aparición del brote.
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Luego debes elegir el tipo de suelo adecuado . El consejo es elegir un suelo equilibrado, pero si quieres puedes elegir uno específico dependiendo del tipo de semilla que pretendas plantar.
Si tienes un balcón o alféizar de una ventana siempre es mejor mantener la planta en el exterior , ya que el aire seco del interior de casa podría comprometer la germinación. Si vives en un lugar cálido, ten cuidado de mantener la tierra húmeda en todo momento.