El uso de restos de pescado en jardinería

El uso de subproductos del pescado en jardinería se remonta a milenios y por una buena razón: enriquecen el suelo y promueven el crecimiento de las plantas. Pero debes tener cuidado con ellos para no hacerte daño. Los pros y los contras de emplear subproductos del pescado en el huerto familiar son los siguientes:

Beneficios

Los restos de peces en descomposición son una fuente importante de materia orgánica que mejora la calidad del suelo.
Nitrógeno: El equilibrio de nutrientes del suelo mejora cuando los peces en descomposición aportan nitrógeno, que es necesario para el crecimiento de las plantas, generalmente en una proporción de 4-1-1 (N-P-K).
Nutrientes distintos del pescado: el hierro, el zinc, el calcio y el potasio están presentes en los desechos del pescado. Aunque las plantas no siempre tienen fácil acceso a ellos, pueden mejorar la fertilidad del suelo.
Reducción de residuos: Plantar espinas de pescado en su jardín es una excelente manera de utilizarlas en lugar de tirarlas a la basura.
Las desventajas de utilizar restos de pescado

Aunque existen algunos beneficios al utilizar restos de pescado, también existen algunos riesgos:

Patógenos: las bacterias que se encuentran en el pescado crudo pueden infectar los cultivos y vivir en el suelo durante mucho tiempo.
El suelo y los cultivos futuros son vulnerables a los parásitos que el pescado crudo puede transmitir.
Atraer plagas: Los mapaches, las zarigüeyas e incluso los perros pueden sentirse atraídos por el olor acre del pescado podrido, lo que puede provocar problemas de salud para las mascotas y los propietarios.
Metales pesados: el mercurio y otros metales pesados que se encuentran en el pescado pueden contaminar su jardín y su suministro de alimentos, ya que no son biodegradables.
¿Dónde puedo encontrar restos de pescado?

Piensa de dónde vienen los restos de pescado si quieres utilizarlos en tu jardín. Es realmente importante obtener productos del mar de lugares que sean éticos, sostenibles y seguros. Utilice sólo las porciones no comestibles del pescado, como la cabeza, las espinas, los órganos y los excrementos, en lugar de todo. Reducir las preocupaciones ambientales relacionadas con la acuicultura a gran escala y garantizar el uso responsable de los restos de pescado también son objetivos importantes.

¿Comprar fertilizante para peces es la mejor opción?

Los fertilizantes para peces disponibles comercialmente han sido procesados para eliminar los gérmenes, por lo que no hay necesidad de preocuparse por usar sus propios restos de pescado, que pueden ser dañinos. El hidrolizado de pescado, las emulsiones de pescado y la harina de pescado son algunos ejemplos de estos fertilizantes; cada uno tiene su propio conjunto de beneficios e inconvenientes desde una perspectiva ecológica.

Subproductos del pescado y sus usos en el jardín

A continuación te presentamos cuatro formas habituales y prácticas de utilizar restos de pescado en tu jardín:

  1. Las plantas ayudarán a conservar los restos de pescado:

Una técnica probada y eficaz con algunas sutilezas para conseguir que los restos de pescado crezcan debajo de las plantas ha resistido la prueba del tiempo. Este método funciona de maravilla con las plantas que producen frutos, y aquí hay un resumen de todos los pasos:

– Elige las plantas adecuadas: para esta técnica, opta por pepinos o tomates, que dan frutos. Debido al peligro potencial que las enfermedades y los parásitos ofrecen a las plantas comestibles, es mejor evitarlo cuando se trata de cultivos de raíces o cualquier planta que se consuma entera.

– Profundidad óptima: coloque al menos de 30 a 60 cm (12 a 24 pulgadas) de tierra alrededor de las espinas del pescado. Esta profundidad evita que los animales desentierren los restos y ayuda a controlar los malos olores. Piense en cómo los requisitos únicos de su jardín afectarán la profundidad, ya que esto afectará la cantidad de materiales en descomposición a los que las plantas pueden acceder.

En términos de tasa de descomposición, los restos de pescado se encuentran entre los materiales orgánicos que se descomponen más rápidamente. Por lo general, a finales de año lo único que queda son huesos limpios. Muchos jardineros han notado que sus plantas están floreciendo, produciendo más y permaneciendo vivas por más tiempo, especialmente las anuales. Se pueden lograr resultados impresionantes utilizando esta estrategia, que se basa en principios agrícolas tradicionales indígenas.

  1. Mezcla de restos de pescado:

El olor desagradable y la dificultad para controlarlo hacen que mezclar restos de pescado con agua sea una opción poco atractiva. A continuación se presenta un examen más detallado de este método:

La mezcla de desechos de pescado produce un olor fuerte, que es uno de los principales problemas cuando se trata de gestión de olores. No sólo el olor es malo, sino que también podría traer insectos no deseados y otras plagas a su jardín.

Una opción es mezclar ligeramente la mezcla de pescado con la tierra. Sin embargo, esta no siempre es la mejor opción, ya que es posible que no elimine por completo el olor ni disuada a los insectos y otros animales.