¿Alguna vez ha intentado propagar hortensias a partir de esquejes pero ha tenido problemas para que enraícen correctamente? Prepárese para sorprenderse con un truco simple que hará que sus esquejes de hortensias echen raíces en poco tiempo, ¡hasta las raíces!

A continuación te explicamos cómo lograr este resultado inesperado:

  1. Seleccione esquejes saludables: elija un tallo sano que no florezca de su planta de hortensia para la propagación. Busque un tallo que sea joven, flexible y libre de signos de enfermedad o daño. Lo ideal es que mida entre 6 y 8 pulgadas de largo y tenga varios pares de hojas.
  2. Retire las hojas inferiores: retire con cuidado las hojas inferiores de la mitad inferior del esqueje, dejando algunos pares de hojas en la parte superior. Esto ayuda a reducir la pérdida de humedad y evita que las hojas se pudran cuando se sumergen en agua o tierra.
  3. Sumergir en hormona de enraizamiento (opcional): si bien no es necesario, sumergir el extremo cortado del corte de hortensia en un polvo de hormona de enraizamiento puede estimular un desarrollo más rápido de las raíces. La hormona del enraizamiento ayuda a estimular el crecimiento de nuevas raíces y aumenta las posibilidades de una propagación exitosa.
  4. Plantar en suelo húmedo o agua: Hay dos métodos que puede utilizar para enraizar esquejes de hortensias: propagación con agua o plantar directamente en suelo húmedo. Para la propagación en agua, coloque el esqueje en un frasco o vaso de agua, asegurándose de que el extremo cortado quede sumergido. Cambie el agua cada pocos días para mantenerla fresca. Alternativamente, plante el esqueje directamente en una maceta llena con mezcla para macetas húmeda, presionando suavemente la tierra alrededor del tallo para asegurarlo en su lugar.
  5. Proporcionar humedad y luz adecuadas: mantener la tierra o el agua constantemente húmedas, pero no encharcadas, ya que el exceso de humedad puede provocar la pudrición. Colocar el esqueje en un lugar con luz indirecta brillante, evitando la luz solar directa, que puede quemar las hojas. Mantener un ambiente cálido y húmedo para estimular el crecimiento de las raíces.
  6. Controle el desarrollo de las raíces: controle el esqueje con regularidad para detectar signos de crecimiento de las raíces, lo que suele ocurrir en un plazo de 4 a 6 semanas. Una vez que se hayan formado las raíces, puede trasplantar el esqueje a una maceta más grande o directamente al jardín, donde seguirá creciendo hasta convertirse en una próspera planta de hortensia.

Si sigue estos sencillos pasos, se sorprenderá al ver sus esquejes de hortensias echando raíces hasta las raíces, brindándole nuevas plantas para disfrutar y compartir con amigos y familiares. ¡Prepárate para presenciar cómo la magia de la propagación se desarrolla ante tus ojos!