La sal de apio es una excelente alternativa a la sal de mesa, que puede utilizarse en cualquier preparación, evitando excederse en el consumo de sal marina normal. A continuación te explicaremos cómo se prepara, cómo utilizarlo y enumeraremos sus beneficios.
El apio es una verdura muy consumida y apreciada en todo el mundo, utilizada también desde hace siglos en la medicina tradicional . Se utiliza para reducir la hipertensión , gracias a una sustancia llamada 3-n-butilftalida que también le da al apio su olor característico.
Esta sustancia puede relajar los músculos que sostienen los vasos sanguíneos, reduciendo la concentración de sangre en ellos y regulando la presión.
Además, la apigenina contenida en el apio dilata los vasos sanguíneos, favoreciendo la circulación sanguínea. Por eso la sal de apio es un ingrediente muy saludable y apto para quienes padecen hipertensión.
Para hacer sal de apio necesitas una raíz de apio entera, incluidas las hojas.
Corta la raíz en trozos pequeños y deja las hojas enteras. Coloca todo en una bandeja para horno, cubierta con papel encerado o para horno.
Hornear a 130°C durante 4 horas, luego retirar del horno y triturar hasta convertirlo en polvo con una batidora o un mortero.
Utilice sal de apio como sustituto de la sal normal. Recuerda que la sal yodada es importante para la tiroides, y una correcta dosis diaria de sal es fundamental para nuestra salud.