La Sansevieria es una planta perenne de increíble belleza, cuya peculiaridad son sus hojas largas y carnosas. Es un tipo de planta muy común en nuestros apartamentos tanto por su fácil cultivo como por su valor ornamental. Pertenece a la familia Asparagaceae y es originaria de las Indias y África.
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Existen muchas variedades de Sansevieria pero las razones por las que la gente la prefiere son su tamaño y su capacidad para purificar el aire. También son muy fáciles de cuidar. Veamos cuáles son las mejores soluciones para tratar mejor esta planta.
Una planta ornamental de fácil cuidado y perfecta para purificar el ambiente del hogar
La Sansevieria puede ser de dos tipos: un ejemplar con hojas rectas y forma de lanza, y otros con hojas que se desarrollan en roseta. Producen flores muy pequeñas pero no particularmente decorativas; sin embargo, si se mantienen en el interior, florecen muy raramente. Hay sesenta especies de esta planta, pero las más extendidas son sin duda Sansevieria trifasciata y cylindrica.
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Sansevieria trifasciata también conocida como lengua de suegra es la más común en nuestros apartamentos. Es originaria de África occidental, tiene hojas largas y carnosas moteadas de verde y blanco con un borde amarillo. También es muy curiosa la cilíndrica con sus hojas cilíndricas de color verde oscuro; este ejemplar es originario de Kenia.
Si por el contrario el espacio del que dispones es muy limitado, la Sansevieria hahnii o golden hahnii es ideal . Este tipo de planta resulta muy curiosa por la disposición en forma de roseta de sus hojas. El tipo dorado se distingue por el color dorado de sus hojas.
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Tener una planta como la Sansevieria en casa, gracias a sus propiedades depurativas, mejora notablemente la calidad de vida doméstica. La NASA también la ha incluido en la lista de plantas depuradoras. Esto es gracias a la capacidad de absorber contaminantes, liberando oxígeno.
Respecto al tratamiento , lo primero que debemos saber es que a esta planta le encanta la luz. Por lo tanto, recomendamos colocarlo de manera que esté siempre expuesto al sol, mientras que la temperatura nunca debe bajar de los 3°C. El riego de Sansevieria es el mismo que el de cualquier planta suculenta, se pulveriza únicamente cuando el suelo está seco; de lo contrario el rizoma se pudre. La tierra no requiere requisitos particulares, basta con colocar un poco de arcilla o trozos de loza en el fondo de la maceta, mezclándolos con la tierra universal. No es necesario podar esta planta, basta con retirar las hojas secas con una herramienta limpia y desinfectada para no comprometer los tejidos.
Finalmente, si las hojas empiezan a mostrar manchas marrones, lo más probable es que estés en presencia de un parásito: la cochinilla . En este caso actuar con agua y jabón si la planta es grande, cuidando de limpiar bien las hojas donde está presente el parásito.