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Los caracoles son moluscos pertenecientes a la clase de los gasterópodos. Se trata de animales que viven tanto en ambientes acuáticos como terrestres. Los caracoles terrestres se caracterizan por una trompa larga que utilizan para alimentarse, en particular para extraer alimento del suelo , o están equipados con un caparazón, como en el caso de los caracoles.
Desde el punto de vista ecológico son animales muy importantes y su comportamiento es capaz de informarnos de los importantes cambios climáticos que se están produciendo. Están presentes en prácticamente todas las huertas y jardines, ya que se alimentan de plantas verdes . Lamentablemente, sin embargo, suelen causar daños importantes a nuestra vegetación, llegando a destruir todas nuestras plantas en poco tiempo. Necesitamos intervenir para eliminarlos. ¿Cómo hacer?
Cómo mantener alejados a los caracoles y babosas de forma natural
Algunas de estas especies, como las babosas, se convierten en auténticos parásitos que causan importantes daños, en términos económicos, a nuestros huertos. Veamos cómo utilizar algunos repelentes naturales para mantenerlos alejados. Entre los remedios más eficaces para ahuyentar naturalmente a los caracoles encontramos el uso de la ceniza que producimos a partir de la madera. Este es un método realmente eficaz para combatir el problema.
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Mezclar la ceniza con los posos del café y colocarla por el huerto. De esta forma los caracoles ya no se acercarán más, ya que les resultará difícil avanzar con esta mezcla. Otro método natural es utilizar azufre en polvo . Incluso este producto, esparcido por nuestro huerto, dificultará el camino de los caracoles.
En tercer lugar encontramos las plantas repelentes . Hay algunas plantas que repelen naturalmente a los caracoles. Entre ellos, los más eficaces son el perifollo, los berros, la ortiga y, finalmente, la mostaza amarilla. Otro remedio natural, siempre entre los repelentes más eficaces, es la cáscara de huevo . El caparazón, de hecho, tiene partes afiladas y es peligroso para los caracoles, por lo que los animales evitarán ir más allá.
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Finalmente, el último método está representado por la sal gruesa . La sal también es un excelente repelente de babosas. La sal, sin embargo, se disuelve con la humedad, por lo que si decidimos utilizarla como repelente, recordemos espolvorearla a menudo por nuestro jardín. También podemos pensar en crear mezclas repelentes compuestas por varios productos mezclados, como cenizas, posos de café, arena y aserrín.