Técnicamente, los frutos se producen a partir del ovario de las flores. Alternativamente, otras partes comestibles de la planta, como raíces, tallos y hojas, se clasifican como hortalizas. Es por eso que las patatas, las espinacas y las cebollas figuran entre las verduras. Para fines culinarios básicos, la diferencia entre frutas y verduras no parece tan complicada. Aquí hay 7 verduras que realmente deberían contar en tu ingesta diaria de frutas.
# 1 pepinos
Fuente: Naturaleza y jardín
Los pepinos son muy fáciles de cultivar. Pero debes tener cuidado de no regarlos demasiado, ya que muy poco puede hacer que los pepinos tengan un sabor amargo.
# 2 tomates
Fuente: Récoltetotable
Las plantas de tomate cherry son muy fáciles de cultivar. Algunos tipos de tomates tienen raíces automáticas, lo que significa que literalmente puedes cortar parte de la planta y se regenerará hasta convertirse en una planta completamente nueva.
# 3 pimientos
Fuente: Propiedad Original
Los pimientos se pueden cultivar fácilmente en el interior, en el alféizar de una ventana o incluso en el jardín. Les gusta mucho sol y mucha agua, pero ofrecen potencial para una cosecha continua.
# 4 berenjena
Fuente: tienda de plantas
Cultivar berenjenas es bastante sencillo. Lo cultivarás en las mismas condiciones que los pimientos y los tomates. Prefiere el clima cálido y húmedo y producirá una cosecha constante durante los meses de verano.
#5 judías verdes
Fuente: Growjoy
¡Las judías verdes son pequeños productores prolíficos! Empieza a prepararlas en cuanto hayan pasado las heladas y podrás disfrutarlas durante todo el verano.
# 6 guisantes
Fuente: Istockphoto
Los guisantes se pueden plantar muy temprano en la primavera y prosperan en climas fríos y con una ligera helada primaveral. Incluso pueden sobrevivir bajo un poco de nieve. Producirán rápidamente hasta que el clima se caliente a mediados del verano.
# 7 calabacín
Fuente: Consejos de jardinería
Las plantas de calabacín pueden producir una gran cantidad de alimento. Producen hojas grandes y se alimentan mucho, por lo que debes asegurarte de plantarlas en un suelo rico en nutrientes y bien regado.