La albahaca es una de las plantas que más se cultivan en el alféizar de una ventana o en un balcón.
Quizás la más famosa de las plantas aromáticas, esta planta también se encuentra fácilmente en el supermercado. Pero no es tanto por su belleza como por su lado práctico que la cultivamos: dos o tres de sus pequeñas hojas son suficientes para enriquecer el sabor de un plato, transformando incluso el plato de pasta más simple en un plato delicioso.
Desafortunadamente, cuando llevamos la planta a casa, a menudo vemos que se seca al cabo de unas semanas. ¿Qué puedo hacer para que dure más? Averigüemos juntos.
cortar las flores
Cuando está sana y madura, la albahaca produce hermosas inflorescencias blancas.
Agradables a la vista, estas flores lamentablemente no son buenas para la planta, que debe gastar mucha energía para mantenerlas vivas.
Para alargar la vida de esta planta, corta sus flores con tijeras de podar o simplemente con las manos, teniendo cuidado de no dañar las hojas.
Riégalo regularmente
A medida que aumentan las temperaturas, lo cual es típico de los meses cálidos, la albahaca necesita cada vez más agua.
Lo ideal es palpar la tierra y, cuando esté seca en la superficie, darle un poco más de agua a la planta.
Puedes simplemente regar desde arriba, teniendo cuidado de no mojar demasiado las hojas, pero sin excederte. Evita también dejar agua en el platillo, ya que aumentarás el riesgo de que se pudran las raíces.
Mantenlo lo suficientemente soleado
Si, pendant les mois froids, il est préférable de garder ce semis à l’intérieur, surtout lorsqu’il est petit et n’a pas encore atteint sa pleine maturité, pendant les mois plus chauds, on peut le garder à l’extérieur con toda seguridad.
Es importante que reciba al menos 4 horas de luz al día.
Quitar las hojas secas o manchadas.
Si alguna hoja comienza a marchitarse o a mostrar manchas, ¡sáquela inmediatamente! Si se trata de una enfermedad, podría extenderse rápidamente al resto de la albahaca, provocando que se seque.
Por lo tanto, también es importante controlar el follaje con frecuencia para detectar inmediatamente cualquier problema e intervenir lo más rápido posible.
Evite las variaciones de temperatura
¡Desafortunadamente, las variaciones de temperatura no son favorables para la albahaca! Cuando el calor aún no ha llegado del todo y las temperaturas nocturnas bajan de los 15°C, la planta puede sufrir un pequeño trauma y perder sus hojas fragantes que pueden esparcir su maravilloso aroma por todo el balcón.
Para mantenerlo sano por más tiempo, intenta colocarlo en un lugar donde las temperaturas se mantengan relativamente constantes. Si las temperaturas bajan demasiado por la noche, lleve la albahaca al interior y sáquela solo por la mañana, cuando las temperaturas suben.